domingo, 21 de mayo de 2017

Alain de Benoist habla sobre el caso Venner.con Nicholas Gauthier


Nicholas Gauthier—Alain de Benoist, usted conocía a Dominique Venner desde 1962,
más allá de la pena o del disgusto, ¿ha sido estúpido su gesto? Aunque él hubiese renunciado desde hace tiempo a la política, ¿este gesto es coherente con su vida, con su lucha política?
Ahora me disgustan especialmente ciertos comentarios. “Suicidio de un ex de las OAS”, escriben unos, otros hablan de una “figura de extrema derecha”, de un violento opositor del matrimonio gay o de un “islamófobo”. Sin contar los insultos de Frigide Barjot, que ha revelado su verdadera naturaleza escupiendo sobre un cadáver.

Ellos no saben nada de Dominique Venner. Nunca han leído una sola línea (de sus más de 50 libros y centenares de artículos). Ignoran en última instancia, que tras una juventud agitada – que él mismo contó en Le coeur rebelle (1994), entre sus mejores obras , había renunciado a toda forma de acción política desde hace casi medio siglo.

Exactamente desde el 2 de julio de 1967. De hecho estaba presente cuando comunicó la decisión. Desde entonces Dominique Venner se había dedicado a escribir, primero con libros sobre caza y armas (era un experto reconocido en este ámbito) y después con ensayos históricos brillantes por estilo y, a menudo, autorizados. Había entonces fundado La Nouvelle Revue d´histoire, bimestral de elevada cualidad.

Su suicidio no me ha sorprendido. Desde hace tiempo sabía que – siguiendo el ejemplo de los antiguos romanos, y también de Cioran, por citarlo solo a él – Dominique Venner admiraba la muerte voluntaria. La juzgaba como la más conforme a la ética del honor. Recordaba a Yukio Mishima, y no es casualidad que en su próximo libro, que el próximo mes será editado por PierreGuillaume de Roux, se titulará “Un samouraï d´Occident” (Un samurái de Occidente). ¿Hasta qué punto se puede medir su carácter de testamento? Pese a que esta muerte ejemplar no me sorprende. Me sorprenden el tiempo y el lugar.


Dominique Venner no tenía fobias. No cultivaba extremismo alguno. Era un hombre atento y secreto. Con los años, el joven activista de la época de la guerra de Argelia se convirtió en un historiador meditativo. Subrayaba, de buena gana, que la historia era siempre impredecible y abierta. No veía motivo para no desesperar, de hecho, rechazaba toda forma de fatalismo. Pero, ante todo, era un hombre de estilo. Aquello que más apreciaba en las personas era la capacidad. En el 2009 había escrito un hermoso ensayo sobre Ernst Jünger, explicando su admiración por el autor de los acantilados de mármol. En su universo interior no había lugar para la burla, ni para los conflictos de una política del politiqueo que justamente despreciaba. Por ello era respetado. Buscaba la capacidad, el estilo, la ecuanimidad, la magnanimidad, la nobleza de espíritu, a veces hasta el exceso. Términos cuyo sentido escapa a quien solo ve los juegos televisivos.


Nicholas Gauthier—Dominique Venner era pagano. Pero ha elegido una iglesia para poner fin a sus días. ¿Una contradicción?

Pienso que él mismo había respondido a la pregunta en la carta que ha dejado, pidiendo hacerla pública: “Elijo un lugar altamente simbólico, la catedral de NotreDame en París, que respeto y admiro, porque fue construida por el genio de nuestros abuelos sobre lugares de culto más antiguos, recordando orígenes inmemorables”. Lector de Séneca y Aristóteles, Dominique Venner admiraba especialmente a Homero: La Iliada y La Odisea eran para él los textos fundadores de una tradición europea, en los cuales, reconocía a su patria. ¡Solo Christine Boutin puede imaginar que se hubiera “convertido en el último segundo”!

¿Políticamente esta muerte espectacular será útil, como otros sacrificios celebrados, como aquel de Jan Palach en 1969 en Praga, o aquel más reciente del vendedor ambulante tunecino que provocó la primera “primavera árabe? Dominique Venner se ha expresado también sobre las razones de su gesto: “Ante peligros inmensos, siento el deber de actuar hasta que no tenga fuerza. Creo necesario sacrificarme para romper el letargo que nos oprime. Mientras tantos hombres se hacen esclavos de la vida, mi gesto encarna una ética de la voluntad. Me doy muerte para despertar conciencias adormecidas”. No se podría ser más claro.

Pero sería un error si no se hubiese visto en esta muerte voluntaria más allá del estrecho contexto del debate sobre el “matrimonio para todos”. Desde hace años, Dominique Venner no soportaba ver más a Europa fuera de la historia, vacía de energía, olvidada de sí misma. A menudo decía que Europa estaba “aletargada”. Ha querido despertarla, como Jan Palach, en efecto, o, en otro periodo, Alain Escoffier.


Así ha probado su capacidad hasta lo más profundo, permaneciendo fiel a su imagen de comportamiento de hombre libre. También ha escrito: “Ofrezco lo que queda de mi vida en un intento de protesta y fundación”. Esta palabra, fundación, es el legado de un hombre que ha elegido morir de pie. 

viernes, 19 de mayo de 2017

SOBRE CESAR VIDAL (ALGUNAS NOTAS UTILES)


Cesar Vidal es protestante. En estos tiempos de laicismo exagerado y militante este comentario puede estar fuera de lugar, pero no lo está dado el carácter de su obra. Cesar Vidal es pues protestante, y desde hace un tiempo conservador Y habitual de las televisiones conservadoras. Es un novelista del tipo best-seller semiculto--ya sabéis, ese que está trufado de referencias históricas oscuras pero no tan oscuras como para que no sepamos reconocerlas y automáticamente sentirnos más inteligentes y cultos por el simple hecho de hacerlo--, e historiador... como Historiador lo suyo es el Viejo Testamento y de hecho tiene un libro muy bueno sobre los Evangelios Apócrifos... pero por desgracia no se ha limitado a ese tema y ha tratado otros muchos con mayor o menor fortuna... en su juventud, como protestante (veis como sí tenia importancia su religión) fue antifranquista, porque Franco no toleró en demasía la presencia de iglesias protestantes en España. 

De ahí a la socialdemocracia durante los años de la transición había un paso... en su primera època como escritor Cesar Vidal era Cesar Vidal Manzanares y sus incursiones en la historia y el mundo editorial llegaron de mano de un editor judío e izquierdista. No es un tópico... Mario Muchnik, su editor, era judío (no practicante), izquierdista y argentino (muy practicante)... y además uno de los administradores más derrochadores del mundo editorial español por lo que las tres editoriales que tuvo, una tras otra, quebraron hasta que finalmente nadie le ayudó a montar una cuerta (era algo así como un Carlos Barral circuncidado, destructor de sus propias empresas editoriales, pero Barral al menos perdió su dinero)... Durante sus tiempos como autor de Muchnik Cesar Vidal escribió un libro contra los autores revisionistas, tradujo (mal traducido) un libro de un periodista sobre los neonazis alemanes que tenía a Michael Kühnen como protagonista, y escribió una biografía en la que ajustaba cuentas con José Antonio Primo de Rivera no tan sólo por ser un lider fascista sino por representar todo lo que era ser un Señor en la década del treinta... cuando eres de clase media, media baja, regordete y torpote, resientes que alguien pueda ser marqués, guapo y tener clase y cada cual se venga como puede... 

Después, siempre debido al protestantismo (luego explico el por qué) evolucionó hacia posiciones neoconservadoras. ¿SE HABÍA VUELTO CONSERVADOR? Probablemente no, pero seguía siendo sionista, y en la década del ochenta llegó a España el neoconservadurismo de los judíos neoyorkinos de la administración Reagan-Bush (el primer Bush), de orígenes izquierdistas, pasados del comunismo a la derecha por su defensa del Estado de Israel, cuando esa entidad dejó de ser querida por la izquierda y el bloque soviético... 

Comprendo que un judío se haga neocon por defender su Estado. incluso sino vive en una colonia polvorienta con la purria okupa, sobre un terreno robado, sino en la parte pija de Manhattan, en un apartamento, dentro de un edificio con portero que no deja entrar a la purria en el mismo, pero ¿por qué se hace neocon un cristiano? Cesar Vidal se hizo neocon porque era sionista y se hizo sionista porque era Evangélico... 

Cesar Vidal pertenece a una iglesia evangélica con base no en Alemania sino en el Sur de los Estados Unidos, que tiene entre sus miembros al mismo Jimmy Carter. Los evangélicos son Luteranos, y Lutero dijo cosas sobre los judíos que hoy le mandarían a la cárcel en Alemania, pero los evangélicos norteamericanos han sido ampliamente influidos por los calvinistas y no sólo han renunciado a esa parte de Lutero sino que además han adoptado la defensa de los judíos que caracterizó desde el principio de su herejia a los calvinistas. Si el hereje Lutero machacaba judíos en Centroeuropa, los herejes calvinistas ingleses (los puritanos) los acogían en Inglaterra dos generaciones después... Cesar Vidal se vuelve así, por efecto de su sionismo, en un escritor anticomunista primero y conservador después, y como ese territorio en España está muy limitado tiene que acabar en radios y televisiones católicas o ultras pero menos (Intereconomia, etc)...

Los más divertido es que nos hubieramos podido ahorrar todo eso si sus padres no hubieran cambiado tantas veces de herejia denominación... La mayor parte de los protestantes, como la mayor parte de los católicos, permanecen/permanecemos dentro de nuestra Iglesia de origen. Hay una excepción a esa regla,,, los recien conversos... aquellos que habiendo renunciado a su catolicismo se han hecho miembros de una Iglesia protestante... por ello no es raro que un protestante de primera generación, buscando la fe que mejor se adapte a sus necesitades reales o imaginarias de religiosidad, pasé de una una iglesia a otra, hasta encontrar una en la que se sienta cómodo... Habiendo abjurado de una fe, además heredada, les es más fácil renunciar a otras que no han formado parte por mucho tiempo de su vida. La familia de Cesar Vidal fue durante un tiempo Testigo de J. Si no se hubieran pasado de los Testigos a los Evangélicos nos hubieramos ahorrado muchos libros... Mientras que los evangélicos no tienen nada en contra de la educación superior y son una Iglesia que no teme moverse en el mundo moderno, los Testigos son una secta que teme que sus miembros más brillantes puedan entrar en contacto con la educación superior... con gente que de verdad hable latín o hebreo, o lea libros de ciencias, historia, política, etc... Si los padres de Cesar Vidal se hubieran quedado con los Testigos ahora él sería, en el mejor de los casos, traductor de ATALAYA al castellano.. MALA SUERTE.


lunes, 15 de mayo de 2017

venner

CARTA POSTUMA DE DOMINIQUE VENNER
“Estoy sano de cuerpo y espíritu, amado por mi mujer y mis hijos. Amo la vida y no espero más que la perpetuación de mi raza y de mi espíritu. A pesar de esto, ante los inmensos peligros para mi patria francesa y europea, tengo el deber de actuar mientras aun me queden fuerzas. Creo necesario sacrificarme para romper el letargo que nos aprisiona. He elegido un lugar altamente simbólico, la catedral de Notre Dame, construida por mis antepasados sobre lugares de cultos de orígenes inmemoriales.
Mientras tantos hombres se hacen esclavos de sus vidas, mi gesto encarna una ética de voluntad. Me doy muerte con esperanza de despertar conciencias dormidas. Me rebelo contra la fatalidad, los venenos del alma, y los deseos individuales que destruyen nuestras raíces identitarias como lo es la familia, fundamento de nuestra milenaria civilización.
Mientras defiendo la identidad de todos los pueblos, me rebelo contra el crimen de querer reemplazar los nuestros.
Pido perdón a todo los que sufrirán por mi partida, primero a mi mujer y a mis hijos así como a mis amigos. Pero una vez pasado el dolor, no dudo que entenderán mi gesto y que el dolor se transformara en orgullo”.